In the face of time and desires, there is a wide space led by chance and destiny. The actions together with the events surrender to the current of time, transforming the riverbed and therefore the land and the body. One thing leads to the other; one rock slips, hits and brakes herself, each part takes a different slope in order to be buried and joined the earth again.
This is how I came to feel the mountain and the river, I walked a long distance to achieve an intimate approach, with the sacred, with the collective. As a kind of pilgrimage to find myself in the Himalayas and being able to touch the Ganges. Remembering the essence of its nouns: River and Mountains: Flowing and Stillness. The mountains contain rivers and the rivers draw the perimeters of the mountains.
Wandering Rocks mentions this nature. The required mobility of the immobile, the stillness that belongs to the current. A series of liquid surfaces, drawings of water in different states, are placed randomly on the table. Portraits of what is naturally moving, quiets the tide to display the present, it’s so close and fast, as each passing second.
These drawings of still water provide a geography of liquid appearance. Geography in which porcelain objects are found drifting. A finger, a flower, a can, a small stick, a cube, a crystal and other things are tending to move, like the pieces on a board game. This is how, on the board, situations and encounters arise, providing symbolic answers for those who want to read life while giving meaning to the present atmosphere
Domestic Caves form the inside of a mountain, one niche done to scale in order to remember the idea of a shelter, a safe place. Shapes breaking the outside while opening the inside. A place that suggests meditation, as a way of looking inside in order to irradiate outside. Reflecting a color to see it from different angles.
In the end, River Waters (video) took me to the Magdalena River to retake a lost scene, to recreate an idea from the past. Despite the cycles and even if the actions repeat themselves, the waters will never be the same. As the rocks are back to the earth, the river becomes the sea.
Natalia Castañeda Arbelaez
Translated by Camilo Vergara
Aguas de Río from natalia castañeda on Vimeo.
Ante el tiempo y los deseos hay un amplio espacio regido por la casualidad y el destino. Los actos junto a los sucesos se entregan a la corriente del tiempo, transformando el cauce, por ende el territorio y el cuerpo. Una cosa lleva a la otra; una piedra se desliza, se golpea, se separa y cada parte sigue una ladera distinta, para volver a enterrarse y unirse a la tierra.
Así, llegué a sentir la montaña y el río, recorrí una larga distancia para lograr un acercamiento íntimo, con lo sagrado, con lo colectivo. Como una especie de peregrinaje para encontrarme en el Himalaya y tocar el Ganges. Recordar la esencia de sus sustantivos: Río y Montaña: Fluir y Quietud. Las montañas contienen los ríos y los ríos dibujan los perímetros de las montañas.
Las Piedras Errantes nombran esta naturaleza. La necesaria movilidad de lo inmóvil, la quietud que corresponde a la corriente. Una serie de superficies líquidas, dibujos de aguas en diferentes estados, se sitúan azarosamente sobre la mesa. Retratos de lo naturalmente móvil, aquietan el transcurrir para visualizar el presente, tan cercano y rápido, como cada segundo que pasa.
Estos dibujos de aguas quietas conforman una geografía de apariencia líquida. Geografía en la cual objetos de porcelana se encuentran a la deriva. Un dedo, una flor, una lata, un palito, un cubo, un cristal y otras cosas forman escenas dadas al movimiento, como las fichas en un tablero de juego. Así en la mesa surgen situaciones y encuentros que pueden ofrecer respuestas simbólicas, para quien quiere leer la vida y darle sentido a la atmósfera presente.
Las Cuevas Domésticas configuran un interior de montaña. Un nicho a escala para recordar la idea de refugio, de lugar seguro. Formaciones que fragmentan el exterior y abren el interior. Un espacio que me recuerda la meditación, mirar adentro para irradiar afuera. Reflejar un color y verlo desde diferentes ángulos.
Al final, Aguas de río (video) me lleva al río Magdalena para repetir una escena perdida. Para reconstruir una vieja idea. A pesar de los ciclos y aunque la acción se repita las aguas jamás serán las mismas. Como las piedras vuelven a la tierra, el río vuelve al mar.
Aguas de Río from natalia castañeda on Vimeo.
Natalia Castañeda Arbelaez
Piedras Errantes.
